La gestión moderna de las operaciones de fabricación y el soporte a los sistemas de ejecución de fabricación se centran en la optimización de la eficiencia y la rentabilidad operativas. 

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La Gestión de operaciones de fabricación (MOM, por sus siglas en inglés) es el arte de establecer las políticas y normas necesarias para mantener el valor de la producción y garantizar que todo y todos funcionen en consecuencia. Implica una continua mejora del inventario, producción, control de calidad, mantenimiento y personal en cuanto a objetivos estratégicos tales como la reducción de costos, la innovación de productos, la sostenibilidad, la calidad y el cumplimiento normativo.

 

La MOM la llevan a cabo aplicaciones como los Sistemas de ejecución de fabricación (MES, por sus siglas en inglés), que transforman digitalmente los procesos operativos y la información para permitir la eficiencia y la transparencia en los siguientes campos: 

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Gestión de rendimiento 

Se puede enfocar la MOM únicamente desde la perspectiva del rendimiento de equipos y producción, o bien evolucionar a la máxima funcionalidad de MOM, integrando distintos dominios operativos mediante la automatización de procesos empresariales. La MOM se puede implementar localmente, o se pueden capturar y estandarizar digitalmente procesos, indicadores clave de rendimiento (KPI, por sus siglas in inglés) y prácticas recomendadas para la implementación en toda la empresa.